Jesús Calleja, el intrépido montañero leonés convertido en showman televisivo visitaba anoche la Ribeira Sacra en las pantallas de Cuatro. Lo hacía en una nueva entrega de Volando Voy, el programa que dirige y en el que semanalmente se propone una acción sin ánimo de lucro. Esta vez, construir una escalera en la finca de Esther, una viticultora que a sus 80 años puede presumir de ser la precursora de la Denominación de Origen y de ser la propietaria del primer viñedo ecológico de Galicia. La reconversión del camino que cruza la viña de Esther en una escalera que le facilitase el trabajo -el desnivel del terreno era en algunas zonas del 75%- ha servido de nexo de unión para promocionar la Ribeira Sacra, "una de las zonas más espectaculares de España y del mundo" confesaba el propio Jesús Calleja durante la emisión del programa. En poco más de una hora y con un marcado tono de humor, Volando Voy dibujaba un retrato no solo de la estrecha relación entre el vino y la Ribeira Sacra sino también de su historia, costumbres y vecinos con historias como la de Pincelo, el zanfonista invidente; a de Paloma, la joven artista rebelde que viajó por el mundo buscándose hasta que lo consiguió ya de regreso a su tierra o la de Cachín, viticultor, jinete y presentador de televisión que logró que Obama probara sus vinos en la Casa Blanca. Estos son, en un pequeño resumen, los mejores momentos del viaje de Volando Voy en la Ribeira Sacra: