Ámbar le dijo muy apenada a su madre que ya no quería ver más a Dany, puesto que su padre estaba muy enfermo y su atención ahora tenía que estar centrada en él. Matilde le respondió que no se preocupara por Cristóbal, porque nada de lo que ellas hicieran influiría en su estado de salud, pero después su hija le confesó que él se lo había pedido. Luego de ser denunciado por maltrato, Dany llegó al colegio para arreglar la situación y dar la pelea, pero el coordinador le contó lo delicada que era la situación y le pidió que se mantuviera alejado del colegio e incluso le aconsejó que se buscara otro trabajo. Dany le confesó a Matilde que tenía sus sospechas en torno a la enfermedad de Cristóbal y le preguntó si alguna vez había visto sus exámenes, a lo que ella le respondió que no, pero que creía que era demasiado grave mentir acerca de eso. Luego, ambos decidieron que para salir de dudas hablarían con el doctor a cargo del tratamiento.