El principal imputado en la trama es un joven, Andrei Petrov, que empezó montando una churrería con su padre en Lloret de Mar y acaba convirtiéndose en el gran constructor y promotor inmobiliario de la localidad de la Costa Brava. A partir de imágenes inéditas de la investigación, el programa revela cómo penetra la mafia en la sociedad española, quiénes son sus miembros que durante años logran pasar desapercibidos y por qué hacen negocio a la vista de todos sin que salten las alarmas.