La primera etapa en la India tiene su inicio en la Playa de Varkala, al sur de la provincia de Kerala. Un lugar sagrado en el que, siguiendo la tradición, los aventureros se someten a una ceremonia de purificación antes de iniciar la carrera en este fascinante país, pero no todos se lo toman con la misma seriedad. El nuevo destino no se lo pone nada fácil a ninguno de los aventureros: 1.200 millones de habitantes, 30 lenguas distintas, más de 400 grupos étnicos y el tráfico más caótico del mundo. Pero sin duda, la pareja que peor lo pasa es la formada por los primos, que no atraviesan su mejor momento y su permanencia se pone en jaque. Una fuerte gripe les ha provocado una gran fiebre. Pero ni los 39º de fiebre merman su sentido del humor. Tampoco su enfermedad les priva de admirar la belleza de las mujeres indias y no pierden oportunidad de ligar con las jóvenes locales. El primer punto que tienen que alcanzar son los canales de Alleppey. Solo los primeros en firmar en el libro rojo tienen su pase para el primer juego de inmunidad en suelo indio, que tiene como escenario los Backwaters. Se trata de unos impresionantes canales de la zona de Kerala, poblados por casas flotantes y majestuosos templos barco. Las parejas que luchen por las pegatinas verdes, tienen que familiarizarse con los cientos de dioses que tiene la religión hindú si quieren hacerse con la inmunidad. Las tres parejas clasificadas deben trasladar grandes cantidades de fruta en canoas. La poca habilidad de algunos participantes proporciona momentos divertidos a todos los habitantes del pueblo que ven cómo son incapaces de remar en la dirección correcta y que no logran mantenerse a flote dentro de la canoa. Durante la carrera, Mª José y Mª Dolores, las amigas jerezanas, se cruzan con una manifestación festiva y ponen admirar los colores de los saris de las mujeres indias y los elefantes engalanados para la ocasión. Se emocionan tanto que hasta se les saltan las lágrimas. Posterior