Mientras Tomás y Nicolás discuten acaloradamente por Esperanza, la novicia decide dejar los hábitos. "Me fui del convento para siempre", le comunica la joven a su prima Gilda. "¿A vos te molesta más que Tomás te haya mentido con lo de Clara o que no deje todo por vos?", le pregunta Gilda. "Que no deje todo por mí", admite la joven. En tanto, en una charla con El Gato,, el obispo confiesa: "Tenía toda mi vida armada para ser religioso y, de repente, llegó Esperanza". "Hay una carrera entre Dios y Esperanza y parece que Dios le sacó varios cuerpos de ventaja", reflexiona su amigo.