El padre TomáS está al frente de una fundación que destina fondos para la mejora de escuelas y hogares carenciados. Sin embargo, su tarea solidaria será muy cuestionada por un grupo de vecinos: una denuncia anónima lo sindica como responsable de una maniobra fraudulenta con ese dinero, donado por empresas y particulares.
Ante tamaña acusación, el sacerdote intentará defender su buen nombre y honor. Para colmo de males, deberá rendir cuentas también a las religiosas del convento -sobre todo al grupo liderado por la hermana Genoveva - quienes dudarán de la versión del cura.
La única que saldrá a defenderlo “con uñas y dientes” será la propia Esperanza, siempre dispuesta a respaldarlo ante cualquier adversidad.
Tomás , responsable de una fundación que ayuda a hogares carenciados, es sindicado como el responsable de una maniobra de malversación de fondos. La única que no dudará de su honestidad será Esperanza, quien lo apoyará en todo momento.