La Brigada de Homicidios acude al Zénit, un exclusivo colegio privado en el que una de sus alumnas ha sido brutalmente asesinada a golpes. Varios miembros del equipo de Eva Hernández centran sus pesquisas en el esclarecimiento del caso mientras los demás investigan un nombre y una dirección que podría llevarles hasta el Cazador. Sin embargo, los datos que arroja la investigación no concuerdan con el perfil del implacable asesino en serie, por lo que Sóller sospecha que el psicópata ha usurpado la identidad de un tercero para llevar a cabo los asesinatos con total impunidad. Entretanto, Pablo se gana la confianza y el respeto de María cuando ayuda al padre de la joven inspectora a librarse de una denuncia menor, iniciativa que propicia un mayor acercamiento entre ambos. Tras percatarse de que Patricia utiliza su capacidad de seducción para sonsacarle información sobre el caso del asesino en serie, Alonso decide apartarse de ella. Por otra parte, Sóller descubre que es feliz colaborando con Eva y compartiendo con ella cada minuto del día.